jueves, 16 de julio de 2009

Del saber y la verdad... (si es que eso existe)

Recientemente he encontrado un elemento interesantísimo que se repite con regularidad en el espíritu humano: El saber, que genera en el hombre mucha seguridad, orden, y tranquilidad. Parece que el saber supone cierto status en el ser humano, una sensación de superioridad, una experiencia de poder. Entonces el saber se convierte en poder -el saber del átomo genera el poder que tiene la bomba atómica-, pero no deseo enmarañarnos en el mundo del poder, sino reorientarnos a la esencia del saber (que sin duda repercute en la realidad humana), y hablar de saber es entrar al mundo de la verdad.


La verdad... pretensión de toda búsqueda, algo que no se duda, lo real. Para creer en la verdad hay que creer en la percepción sensorial, creer que percibimos la realidad, hay que confiar demasiado en los sentidos, cosa de lo cual carezco, a lo mejor por mi naturaleza que me impulsa a cuestionarlo todo. No sé, a lo largo de la historia humana la verdad ha cambiado tantas veces que dudo que deje de cambiar. Aún así, al mismo tiempo hay verdades opuestas que conviven y que funcionan, esto deja claro que la verdad (única y axiomática) no existe, sólo hay diferentes interpretaciones de algo que definitivamente tiene efecto en nosotros.


Un ejemplo de ello es el conocimiento médico, ¿cómo explicaría la medicina occidental la curación de millones de pacientes chinos equilibrando el chi?, o ¿por qué a un buen amigo le funcionó la acupuntura para el acné en vez de todas las pastillas que le mandó el dermatólogo? , el creer tener la verdad tiene su precio pues podemos quedar en la ignorancia total, en ningún orden, en ninguna explicación o en el peor de los casos, en ninguna solución.


Así, creo que es el saber, que sólo es accesible por interpretaciones, y que ser sabio es en realidad darse cuenta de la ignorancia propia, de asumir con una sonrisa que la verdad no existe y proponerse conocer todo lo que se pueda, proponerse a conocer nuevo saber que funcione y que nos alivie, sea el que sea, la modernidad también nos ha limitado un poco con el "método científico" (el cual ciertamente nos ha brindado muchas respuestas) restringiéndonos severamente de la valía de la particularidad, e intentando comprimirlo todo en enunciados totalizadores, por eso es común que alguien confíe en una explicación comprobada CIENTÍFICAMENTE. Creo que si existe una verdad por sobre todas las verdades, ésta no puede ser percibida por la realidad humana.


He escrito esta nueva entrada por la costumbre extrañísima de mucha gente de restringir lo que sabe, de desacreditar un saber diferente, de abstenerse del debate y de lo que considero peor: el dogmatismo, costumbres que critico fervientemente pero que respeto dado a que participamos en la vida desde circunstancias diferentes.


Pienso que se deben utilizar las verdades que nos expliquen mejor a cada uno, y ahora más que nunca creo que encontrar esas verdades es una labor de toda la vida.

3 comentarios:

  1. bravo bravo!!!!!! *gets emotional*

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  2. Muy muy muy bueno, de verdad seguís creciendo en todo el sentido de la palabra, me siento orgulloso de ver como te has desemvuelto siempre, desde que eras preadolescente, siempre sobresalias con una "emiliada", jejejeje, pero muy buena, Seguí así, llegarás muy alto, un Abrazo

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  3. "no existe verdadabsoluta" es esto tambien mentira?

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